No es un secreto que, cuando se trata del organismo humano, los virus son contagiosos. Por eso es tan fácil atrapar una gripe cuando un miembro de su familia está resfriado. ¿Pero qué pasa con la infidelidad? ¿Sabías que también puede ser contagiosa?
Según un nuevo estudio publicado en la revista “Archives of Sexual Behaviour”, la exposición a las infidelidades puede hacer que este comportamiento se convierta en “normal” en una relación monógama.
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La investigación examinó a individuos que descubrieron la infidelidad de otras personas, para luego verificar si tenían una mayor probabilidad de ser infieles. Para esto, se probaron participantes de tres estudios dirigidos a personas en relaciones heterosexuales monógamas.
Estudios analizados
Estudio 1
El primer estudio siguió a estudiantes universitarios que habían estado en una relación seria durante al menos cuatro meses. Mientras que algunos vieron un video que informaba que la infidelidad ocurre en el 86% de las relaciones, otros vieron un video que afirmaba que ocurre en el 11% de las relaciones.
Luego, los participantes escribieron acerca de una fantasía sexual con otra persona. Los resultados mostraron que las estimaciones de los videos no afectaron los niveles de deseo por sus parejas actuales.
Estudio 2
El segundo estudio siguió a estudiantes universitarios que habían estado en una relación heterosexual durante al menos 12 meses. Algunos leyeron una confesión de infidelidad, mientras que otros leyeron sobre hacer trampa en trabajos universitarios.
Luego, vieron fotos de 16 personas y tuvieron que decidir rápidamente si podrían ser sus parejas románticas. Quienes leyeron la confesión sobre infidelidad tenían más probabilidades de responder “sí”.
Estudio 3
Para el último estudio, los estudiantes en relaciones heterosexuales durante al menos cuatro meses leyeron los resultados de investigaciones que indicaban que la infidelidad romántica estaba presente en el 85% de las relaciones o que la prevalencia de trampa académica era del 85%.
Luego, conversaron por mensajes de texto con un asistente de investigación, cuya foto estaba vinculada a la aplicación. Esta persona les preguntaba sobre sus intereses, pasatiempos y preferencias alimentarias. Al final, decía: “¡Definitivamente has despertado mi curiosidad! Espero verte de nuevo, esta vez cara a cara”.
Después de la conversación, se preguntó a los participantes sobre su atracción por el asistente de investigación y su compromiso con su pareja romántica actual. Los resultados indicaron que aquellos que leyeron estadísticas sobre infidelidad estaban menos comprometidos en su relación y más propensos a expresar el deseo de hablar nuevamente con el asistente de investigación.
En todas las condiciones, los hombres estuvieron menos comprometidos con sus relaciones que las mujeres.
La exposición a la infidelidad aumenta los riesgos de traición
Como resultado, los investigadores afirman que, cuando la infidelidad se normaliza y se difunde en la realidad de alguien, el deseo de esa persona por su pareja actual disminuye y los sentimientos de culpa por una posible infidelidad se suavizan. Por otro lado, el deseo por los demás aumenta.
“Saber que otras personas están teniendo relaciones extramatrimoniales puede hacer que las personas se sientan más cómodas cuando tienen estas relaciones”, declararon los autores del estudio. La información es de “Slice”.